26.3.15

Literigatos | Uno bien muerto

¡Hola, imaginantes!

Espero que estén bien y que, si son estudiantes, les haya ido excelente en los parciales/exámenes. Centinela y Santos han estado muy ocupados haciendo trabajos y estudiando  muchísimo (ya ven, que ellos sí son unos niños comprometidos con su educación), mientras que yo he participado en una exposición a nivel nacional llamada Imagina tu futuro: Movilidad Social, que ha sido muy chachi. En fin, que toda esta cháchara es para decirles (y justificarles) que no he leído nada desde hace semanas y que temo por mi lectura actual: El retrato de Dorian Gray. Es mi tercer intento con ésta novela y quiero darme por vencida nuevamente y empezar a leer algún otro libro, porque esos diálogos tan largos de Wilde me adormecen casi siempre. Hnnng, no me maten por favor. 

Una vez contadas mis alegrías y penas, empiezo con el punto principal de nuestra entrada: -redobles-  ¡Otro literigato! De hecho, fue el primero que encontré, pero por errores del destino, se publicó primero el de Solsticio 

Libro: Puro
Autor: Julianna Baggott
Roca Editorial
Nombre y características del gato: no mencionadas
Amo del gato: no mencionado
Fragmento:
Bradwell encontró un gato muerto en el césped chamuscado, lo metió en una caja  e intentó resucitarlo en vano. Su tía se había quedado ronca y le costaba respirar..., y estaba ya un poco trastornada, posiblemente.

Y como no hay fotografía, les dejo esta para que les haga un poco de gracia:

¿Cómo van con sus literigatos?

Cambio y fuera.

19.3.15

Reseña | Hija de humo y hueso - Laini Taylor


Título: Hija de Humo y Hueso
Autor: Laini Taylor
Páginas: 465
Editorial: Alfaguara
ISBN: 8420410985
Karou es una estudiante de arte de 17 años que vive en Praga. Pero ese no es su único mundo. A veces, Karou desaparece en misteriosos viajes para realizar los encargos de Brimstone, el monstruo quimera que la adoptó al nacer.

Tan misteriosa resulta Karou para sus amigos, como lo es para ella su propia vida: ¿cómo es que ha acabado formando parte de una familia de monstruos quimera? ¿Para qué necesita su padre adoptivo tantos dientes, especialmente de humanos? Y, ¿por qué tiene esa recurrente sensación de vacío, de haber olvidado algo?

De pronto, empiezan a aparecen marcas de manos en las puertas, señal de que la familia de Karou corre grave peligro. Karou tratará de cruzar al mundo quimérico para ayudarles, pero es perseguida por los serafines. Entre ellos se encuentra Akiva, un ángel arrebatadoramente hermoso al que Karou está unida de forma que ni ella misma puede imaginar.

Opinión Personal (sin spoilers):
Hace dos años, cuando aún estaba en la universidad, me uní a un club de lectores al que asistía un grupo de amigas que idolatraban a Laini Taylor y su obra Hija de humo y hueso. Me encantaba escuchar a una de ellas en particular, pues de todas, era quien demostraba entusiasmo y pasión por la lectura; era la clase de chica que leía autores desconocidos, conocidos, best-sellers y clásicos y se expresaba con muchísima emoción, sin miedo a ocultar sus sentimientos. Como se notaba que la lectura era su pasión, confié ciegamente en sus palabras. Primer error. Después, alguien me dijo que me prestaría el libro, que era buenísimo, una lectura obligatoria, pero la dichosa historia fue tan amada que había una larga fila de personas por leerlo y jamás llegó a mis manos. Entonces pensé que tendría que ser realmente bueno para causar tal furor. Segundo error. Fue hasta hace unas semanas que aventuré a leerlo (no a comprarlo, gracias al cielo), y las expectativas se destruyeron como si hubiese caído en picada desde la termosfera.

La historia inicia con el encuentro entre Karou (la protagonista) y su ex novio, Kaz. Entre rabietas porque su ex es el nuevo modelo para su clase de dibujo, se nos muestra que Karou no es una chica ordinaria: Posee un collar y un brazalete hecho de cuentas que le permiten pedir deseos pequeños que se hacen realidad al desaparecer las cuentas. Así es como logra deshacerse de Kaz y como también obtuvo su natural cabello color lapislázuli. Además de eso, Karou tiene unos tatuajes de ojos, hamsas, en las palmas de las manos, los cuales no recuerda haber obtenido; y vive entre dos mundos: el de las quimeras (seres con cuerpos semi humanos y características animales) y los humanos. Creció bajo la protección de Brimstone, una quimera con cuernos de chivo y cuerpo frondoso y semi humano, y en compañía de dos quimeras más. A cambio de cuentas que le permiten cumplir deseos, Karou trabaja para Brimstone comprando dientes de animales de todo tipo al rededor del mundo. Pero no crean que la chica viaja en el transporte mundano. ¡No! Cuando tienes a una quimera por padre y a un actor como ex, necesitas tener más chispa en tu vida, y es por eso que  viaja a través de portales mágicos esparcidos por el globo terráqueo, los cuales tienen como destino la tienda de Brimstone, donde guarda los dientes en tarros. La pregunta es: ¿para qué ocupa tanto diente? ¿Le está robando la chamba al ratón Pérez y al hada? ¿O es que teme mucho quedarse chimuelo? Y la más grande interrogantes son: ¿por qué últimamente los portales están marcados con la huella quemada de una mano? ¿Tiene eso relación con los avistamientos de ángeles que han sorprendido al mundo? ¿Por qué una de esas criaturas ha perseguido a Karou? ¿Y cómo es que ella pudo enfrentarse a uno y sentir atracción hacia él en ese mismo momento, incluso cuando él estaba a punto de matarla?

 Karou está en medio de una crisis existencial y no sabe quién es ni por qué le hace ese tipo de trabajitos a Brimstone y necesita averiguarlo, al mismo tiempo que se dejará llevar por sus sentimientos precipitados hacia el ángel, Akiva… Así que de eso se trata Hija de humo y hueso, de cómo Karou descubre su identidad y del por qué tanto misterio ha rodeado su vida desde el comienzo. Ya no les diré más, a menos que quieran leerlo la otra parte de mi opinión donde hablo de nada más que spoilers.

Así que ahora, lo malo según yo: El universo creado por Taylor es fantástico, PERO la narración fue tan floja, mucha cháchara metafórica que me fastidió e hizo poner los ojos en blanco incontables veces. En una historia como esta, de fantasía, hay tanto por explorar y describir (sin caer en el aburrimiento), tanto por imaginar… Me hubiese gustado una narración más compleja, diálogos un poquito más largos y algo, una pisca de algo. ¡El romance! NO-PUEDE-SER. No entiendo por qué tiene que haber esta clase de romance precipitado… Se hizo un poquito entendible cuando se descubre quién es Karou, pero aun así fue desesperante. ¡Una tortura! La poca participación de personajes interesantes: Brimstone, Razgut e Izil. Dios mío, de todo el libro, ellos tres me fascinan y me causan mucha curiosidad. Quiero saber quiénes son, sus historias y todo sobre ellos… ¡¿Por qué Laini? ¿Por qué me los quitas de las páginas cuando más los quiero?

SPOILERS:

Esto es para quienes ya leyeron el libro o para quienes les de igual el saber o no.
Antes hablé del romance precipitado. Cuando descubrí que Karou es una reencarnación, la antigua amante de Akiva, acepté un poco lo precipitado del romance. Sin embargo, continuó pareciéndome demasiado empalagosa la historia de ellos. Hubo poco de Karou y Akiva para que hubiese tanto amor entre ellos y después, mucho de Madrigal y Akiva. Su historia, contada toda de un solo tirón exprés, me desesperó. Creo que fue el narrador. Joder. Me jodían mucho las  amigas de Madrigal.
El final, bueno, el final fue otra cosa. Me encantó que Akiva cometiese un error fatal, el acabar con la tienda y con todos los que estaban dentro de ella. Aunque realmente, el epílogo me dejó muy indiferente a la continuación.

En conclusión: me gustó la historia, pero cambiaría muchas cosas, especialmente la narración y el romance, aunque definitivamente vale la pena por su originalidad. ¿Y ustedes qué opinan?

14.3.15

Listofilia | Pajarillos a volar

¡Hola, imaginantes!

Hace ya varias semanas que no traía una de estas entradas para relajarnos. Vagando por Goodreads, deseando más y más libros, me topé con una portada chachi, llena de color y plumitas. Eso me dio una idea, y ta dán, aquí estoy con mi montón de portadas para presumir. 

Me encantan las aves: algunas son símbolo de libertad, paz y sabiduría; y otras representan cosas lúgubres o misteriosas. Por ejemplo, en México se cree que los tecolotes son un augurio de muerte... Cuando yo era chiquita, me frikeaban mucho esas cosas y hasta el sueño me quitaban. Ahora, bueno, ahora las cosas siguen siendo más o menos igual. En fin, que me encanta el misticismo de estas criaturas, su capacidad para volar y ese aire tan elegante que tienen en sus portes.

He aquí mis portadas favoritas:

 

No me fijé mucho en las sinopsis de los libros, pero no me importaría decepcionarme un poco con el contenido porque estas ilustraciones me han fascinado. Mis favoritas son: Tandem de Anna Jarzab, The Owl Keeper de Christine Brodien-Jones y The Silent Land de Graham Joyce. 

Díganme ustedes, ¿cuáles son sus favoritas? ¿Qué personaje, que sea un ave, ha dejado una huella en sus corazones literarios? Apuesto a que muchos de ustedes están pensando en Hedwig. 

Saludos y besos, 
Ana.


9.3.15

Aviso | Problemas con los banners de desafíos y botones de afiliación

¡Buenos días, imaginantes! (o no tan buenos).

Me veo en la necesidad de hacer esta molesta entrada que nada tiene que ver con literatura ni cine ni nada de lo que tanto nos entretiene. Y es que no sé si algunos se habrán percatado en sus propios blogs o en este mismo, pero el día de ayer tuvimos un (no tan) pequeño problema con todos los banners y botones de afiliación del blog.

Como su pachorruda servidora (coff Centinela coff) tenía todos estos recursos alojados en una página externa de la cual se había indebidamente confiado (photobucket) sin antes informarse bien del limite de banda ancha (ok, sí lo tenía presente pero lo había ignorado deliberadamente), pues resulta que el día de ayer, en algún punto, rebasamos tal límite (esto es, el número de veces que son utilizadas nuestras imágenes y enlazadas a otras páginas). Así pues, resulta que nos las reemplazaron todas por un horrible y molestísimo cuadradito gris, el cual seguramente aún se encuentra en sus lindísimos blogs. Para arreglar esto la única opción que nos daban era pagar, y como de ninguna manera puedo hacer tal cosa, pues hubo que subir de nuevo todas las imágenes (esta vez a la propia cuenta de google, para estar más seguros) y listo. El problema, es que como cambia el hospedaje, cambia el enlace de las imágenes, ergo, todos aquellos que tienen nuestros botones y banners tendrían que reemplazar los códigos manualmente.

¡Lamento mucho que tenga que ser así! En verdad no pude venir con otra solución. En verdad, en verdad lo que más me molestó de toda esta situación fue este último hecho (sí, tal vez y sólo tal vez e día de ayer la pequeña Centinela estaba echado humo por sus centi-orejas). En fin, me disculpo una y mil veces. Pero para todos los que ocupan, los banners afectados fueron los siguientes: botones de afiliación, Literigatos, condecoración de Cazagatos Profesional 2014, Lee el nombre de tu blog, las 25 películas + esperadas, 30 días 30 dibujos, listado del desafío 30 días 30 dibujos.

En fin, aquí abajo les dejo todas las imágenes con sus respectivos códigos listos para copiar y pegar...

AFILIACIÓN:



DESAFÍOS:













Perdonen la molestia. En verdad espero que esto no nos vuelva a pasar (si es que parezco novata, hombre).

3.3.15

Reseña | La restauradora (La reina del cementerio #1) - Amanda Stevens


Autor: Amanda Stevens
Titulo original: Graveyard Queen
Páginas: 368
Roca Editorial
ISBN: 8499187110
Amelia Gray tiene veintisiete años y desde los quince puede ver fantasmas. Heredó el don (o maldición) de su padre, y también a través de él supo las reglas que todo médium debe respetar para poder serlo y llevar una vida tranquila: no alejarse de los campos santos; ignorar la presencia de fantasmas a su alrededor, aunque quieran hacerse presentes; no relacionarse con personas a las que los espíritus acechan. Amelia se dedica a restaurar cementerios de valor histórico artístico y con ello cumple con una de las reglas que su padre le impuso en su momento también consigue llevarlas a rajatabla. Esto es, hasta que todo cambia.

Un asesinato en uno de los cementerios en los que está trabajando la pone en contacto con un detective acechado. Y hay algo que la empuja a estar cerca de él, a pesar del peligro al que casi de inmediato se ve sometida. Los fantasmas del detective empezarán a amenazarla y ella deberá elegir entre sus sentimientos y su propia seguridad?

Opinión personal y fangirlin':
Hello, fellas!

Hace mucho que no me sentía así, tan feliz y encantada, tan ansiosa por terminar una historia y saber más y más, y al mismo tiempo temerosa de que todas esas emociones terminaran al dar con el punto final. Ay, pero es que este libro me gustó muchísimo, igual fue porque últimamente había leído novelitas un que eran muy meh, pero me siento así (y es lo que importa):
Comencé a leer este libro por su portada (así de superficial soy). Simplemente me recordó muchísimo a la de El Santuario de Anne Rice, que es, por cierto, uno de mis libros favoritos. Ese aire gótico, tenebroso y el título de la saga me enamoraron en unos cuantos segundos, así que a comer hojas cuál monstruo come-libros.

La Restauradora cuenta la historia de Amelia Gray (¿qué no hay otros apellidos?), una mujer bastante peculiar: puede ver fantasmas. ¿Saben qué me encantó de esta historia? Amelia. Amelia porque no es bruta y patosa como muchas de las protagonistas que generalmente aparecen en la literatura juvenil, aunque claro está, ella no pertenece a éste género. Amelia puede ver fantasmas desde niña. Estaba en un cementerio cuando vio al primero, un anciano, y su padre le indicó que no lo mirara. Así fue como descubrió el secreto de su padre adoptivo, cómo se enteró de que además de soportar la cantaleta diaria de los vivos, también tendría que soportar la de los muertos y hacerse la de ojos ciegos. Esto porque, cuando los fantasmas se percatan de que puedes verlos, se aferran a ti y se alimentan de tu energía cual sanguijuela de tu sangre.

Así es como Amelia crece, entre lápidas y fantasmas, alejándose de los acechados (personas que siempre están rodeadas por estos entes); se convierte en una mujer fuerte, una restauradora de cementerios y sigue las reglas que su padre le enseñó para mantenerse a salvo de los fantasmas: no alejarse de los campos santos; ignorar la presencia de fantasmas a su alrededor, aunque quieran hacerse presentes; y no relacionarse con personas a las que los espíritus acechan. Todo va bien, hasta que un día le ocurren cosas extrañas, más allá de ver fantasmitas, claro, y termina colaborando con el detective John Devlin para dar con el autor de una serie de asesinatos.

Aquí es donde comienza lo emocionante (y lo brillante): no solo es una historia paranormal, sino que Amanda Stevens le añadió un toque de misterio a los sucesos criminales y también, unas cuantas pinceladas de romance, sin pasar por alto muchos otros detalles paranormales que enriquecen mucho la historia (por ejemplo, que después del atardecer se rompa el velo entre los vivos y los muertos, que haya otro ente más poderoso y aterrador, que existan personas con otro tipo de poderes sobrenaturales, etc.). Otra cosa que me agradó, fue que cuando Amelia conoció a su protagonista masculino, no se derritió inmediatamente por él; obviamente la chica se siente atraída hacia él por su físico y el misterio que representa su pasado, pero hasta ahí. No quiero contarles más de esta novela porque me gustaría que la leyeran y que me digan les parece tan genial como me lo ha parecido a mi. 

Amanda Stevens hace uso de una redacción agradable, personajes que a mi parecer estuvieron conocidos y una trama fascinante que me dejaba ansiosa. Leí este libro en viajes de autobús, de camino al trabajo y del trabajo a casa; a veces, cuando el libro no es tan interesante, solo escucho música, pero con La restauradora no pude parar. Fue emocionante, muy agradable e intrigante. Una de mis lecturas favoritas del año pasado y con un final muy abierto, estoy preparando las garras para apañarme la continuación.